Capítulo 1: Pequeño incidente
“Si tú no te esfuerzas, nadie lo hará por ti”, recordó la chica al despertarse aquellas palabras que su tía hace algún tiempo atrás le dijo. Se levanto de la cama con su pelo desordenado y apenas dándose cuenta de que las sabanas y la almohada estaban en el suelo. Fue al baño e hizo lo de costumbre, se lavo los dientes, la cara, y justo en el momento en el que se iba a meter en la ducha, llamaron a la puerta.
-Sakura-san, acaban de llamar de tu trabajo de las mañanas, dijeron que ya no fueras más-
-¿¡Que!? ¡Porque! No pueden, me habían dicho que si llegaba tarde de nuevo me despedirían, pero si aun estoy a tiempo- dijo exaltada la chica
-Pero de que hablas Sakura-san, es medio día, acuérdate que te despertamos en la mañana porque tus despertadores no paraban de sonar, estuvimos como 15 minutos hasta que al fin saliste- dijo la casera con cara de anime (O.O’) -¿acaso no lo recuerdas?-
-jejeje, no se enoja si le digo que no me acuerdo (^^’)- la casera se cayó (obvio que hay que imaginárselo como anime xD) –oh pero dijo que es medio día, llegare tarde entonces, adiós-
La peli rosa cerró la puerta en la cara de la amable señora, y corrió como un flash a la ducha, por aquí y por allá lavo su cuerpo, tratando de quitarse la pereza. Con la toalla a medio poner, corrió al armario, saco lo primero que vio, y se lo puso, aun con partes del cuerpo mojadas. Su pelo goteaba y goteaba, ya que no se lo había secado y el agua se acumulo en las puntas. La casera aun seguía en la puerta, había quedado atónita ante lo que le había dicho la chica. Se abrió la puerta, pero lo único que alcanzo a divisar fue un flash rosa.
Sakura corría velozmente con un pedazo de tostada que le había quedado de ayer en la noche, la cual fue parte de su cena. Llego a un lugar donde reparaban bicicletas.
-Buenos días señor- dijo la chica un poco agitada, sin perder el paso de la corrida que llevaba
-Oh! Buenos días señorita, ¿Qué desea?- dijo aquel hombre
-Esto… hace dos días vine para que me repararan mi bicicleta, quisiera saber si ya la tienen lista-
-Sí, ya recuerdo, una bici negra que se le habían roto las cadenas, si la tenemos por allá, pero falta algo, si gustas puedes venir a buscarla a las 6 de la tarde, es que tenemos mucho trabajo- dijo el simpático hombre
-hummm… bueno, me hare el tiempo. Muchas gracias- dijo la chica, desapareciendo nuevamente como un flash rosa
Por fin llego a su segundo trabajo, y justo a tiempo.
-¡Sakura-chan! Llegas a tiempo, ya no limpiaras mas, ahora asciendes a mesera junto con Ino-chan- dijo Ichiraku
-Pero por lo que veo Ino llega tarde- dijo Ayame, la hija de Ichiraku
-Sí, si ella me dijo que llegaría un poco tarde porque tiene que hacer un papeleo junto con sus padres- dijo la peli rosa
-Bueno, no importa, cuando llegue le diremos la sorpresa, ahora manos a la obra, hay que ordenar las cosas antes de abrir… ahora que lo pienso, es raro que llegues tan temprano Saku-chan- dijo Ichiraku con cara de extrañado
-Ah, sí, etto… es que me despidieron del otro trabajo, ahora para compensar la paga del trabajo anterior, tengo que encontrar dos trabajos normales, que paguen bien, me costara pero tengo que hacerlo- dijo Sakura un poco triste ante esto ultimo
-Saku me impresiona tu fuerza de voluntad- dijo Ayame con lágrimas en los ojos, en señal de admiración
En ese momento llego Ino muy agitada, al parecer llego corriendo
-¡Inoo!- grito la peli rosa –Adivina que, ¡nos ASCENDIERON!- dijo con una gran cara de felicidad, quería mucho a su amiga, a pesar de todo
-¿Qué? A la frente de marquesina también… ohh ¬¬- aunque en el fondo estaba muy contenta de que ambas estuvieran juntas trabajando de nuevo en lo mismo
Sakura solo le sonrió, porque sabía que no lo decía enserio, la conocía desde pequeña, y ya sabía de sus cambios de humor, y lo que en realidad quería decir en ese momento
-Yo también me alegro de que estemos juntas de nuevo ^^- dijo Sakura
-Q-Quien dijo eso, frentesota- dijo Ino sonrojada, todos se rieron frente a esta reacción
Ordenaron el restaurant, aun faltaban como 30 minutos para abrir el local cuando se oyó la campanita de la puerta avisando que alguien había entrado.
-Todavía no está abierto, aun estamos ordenando, vuelva más…- hubo un silencio, Ino se quedo en silencio, y las otras chicas volvieron la cabeza para saber que había pasado.
-Ino-chan, que pasa- dijo Sakura asustada por la cara que ponían todas al ver a esas personas, no sabía que ocurría. De pronto, todas se ponen a gritar, hasta Ayame que supuestamente era la más tranquila del lugar, todas excepto Sakura que seguía sin saber qué rayos era ocurría
-Chicas… chicas, cálmense, no ven que son clientes especiales, AAAHH! ¡NIÑAS! Por favor- les suplico el dueño del local, pero no le escuchaban. Era nada más y nada menos que el famoso cantante, modelo, y futuro actor Sasuke Uchiha que venía al parecer con otra persona mas –(que puedo hacer… no los puedo atender yo, estoy cocinando, y las chicas tampoco, no me imagino que puedan hacerle, pero… AHÍ ESTA MI SOLUCIÓN)- se dijo para si Ichiraku
-Sakura-chan, puedes venir un momento por favor- dijo mientras miraba a su hija y a sus trabajadoras acosándoles a los señores que aun estaban parados en la entrada. Cuando al fin Sakura llego a la cocina Ichiraku le dijo en voz baja –Sakura-chan quiero que atiendas a esos clientes, ya que veo que las demás no están en condiciones, y tu, al parecer eres la mas lucida de todas- le dijo mientras la muchacha seguía con cara de no entender que era lo que pasaba
-Pero jefe, ellos no pueden estar aquí, aun estamos ordenando… además no sé porque tanto escándalo por esos hombres de ahí- dijo Sakura un poco enfadada y casi gritando por el escándalo que hacían sus compañeras
-No importa, después te lo explico, pero ahora como jefe te estoy dando una orden y debes de obedecerla- le dijo con voz dura y firme, como si estuviera enojado, pero al final lo suavizo con una pequeña sonrisa.
-Está bien- dijo desganada, y dispuesta a obedecer aquellas órdenes cueste lo que cueste. Cuando al fin logro llegar al frente de aquellas personas, les miro y con una sonrisa fingida, para ella, para el que acompañaba al modelo, fue muy agradable, les dijo –Bienvenidos, ¿puedo enseñarles su mesa?-
-Sí, muchas gracias, ya me estaba cansando- dijo con una sonrisa aquel señor, pero de verdad muy agradecido porque enserio estaba cansado ya de esperar y de tanto acoso XD. Ya sentados, Sakura les atendió, pero se sentía rara, sentía como si miradas asesinas estuvieran sobre ella.
-Bueno, ¿Qué es lo que desean ordenar?- les entrego una carta del menú, y les pregunto con la misma sonrisa que antes
-ammm… quiero los waffles del desayuno 1, y el jugo del desayuno 5 por favor- dijo aquel hombre
-Y usted que desea- lo quedo mirando, fijo, porque no había tomado la carta del menú
-Para él lo mismo por favor señorita- a Sakura le sorprendió, por lo mal educado que era el otro tipo, además no se saco los lentes ¬¬.
-Está bien, de inmediato vuelvo con sus ordenes- se retiro, y fue a pedir las ordenes, mientras todas ordenaban y la miraban con odio. No paso mucho cuando llego con las órdenes –Aquí tiene- le dio la orden primero al hombre simpático, luego se acerco al súper modelo (PD: ella no sabe eso) –Aquí tie…- no alcanzo a terminar la frase, ya que el jugo se le fue de las manos y cayó encima del chico –ne- la término. Entonces, el tipo se saco los lentes y la miro fijo, tenía unos ojos profundos, que la hipnotizaron, pero no por mucho –lo siento, inmediatamente le traeré algo- fue corriendo a la cocina, sin darse cuenta de que la siguió. Al darse la vuelta le encontró con el pecho de él. –A-aquí t-tiene- se asusto al verlo ahí, y sobre todo, tan cerca de su espacio personal
-No es necesario- le sonrió muy amablemente, miro hacia atrás del hombro de la chica y pregunto –¿Usted es el jefe del local?- se dirigía a Ichiraku…
CONTINUARA...
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